lunes, marzo 26, 2007

Libro de quejas

Escribo esta vez para quejarme. Estoy cansado, extenuado, hastiado, asqueado a niveles insospechados, de la mala onda de ciertas personas.
No puede ser que, esforzándose uno (no siempre, a veces sale solo) por vivir en paz y armonía con nuestro entorno, siempre haya alguien que te cague la vida.
Ya sea con quejas, o críticas no-constructivas, o contestaciones totalmente repudiables, bajan desde su torre de ego a molestar.
Que pasa cuando esto sucede?
Pues, o nos enojamos y le reprochamos a la otra persona su actitud, en cuyo caso, los más osados, se sorprenden de nuestra reacción y tienen el descaro (si, señoras y señores, no encuentro otra forma de expresarlo) de enojarse con nosotros, o bien, intentamos reparar la situación continuando con nuestro buen humor acostumbrado y/o preguntándoles tranquilamente por que tal exaltación. Esto puede ser, para los más perversos, casi como un puñal directo al corazón, se sienten atacados y quizás en parte avergonzados. Herido su orgullo, prefieren "deleitarnos" con una serie de demostraciones dramáticas y de destreza actoral, haciéndose los incomprendidos y prefiriendo "no hablar más por el momento".

Por qué nos ha castigado el creador, con tales seres?
Porque, yo puedo comprender a Pepe, que normalmente es una persona tranquila y por alguna circunstancia externa (o no) que lo tiene estresado y ofuscado, responde mal. Usualmente este tipo de personas pide perdón (algunos más inmediatamente que otros).
Pero a esos individuos con un ego tan grande, solo comparado con su pésimo humor y, casi salvaje (diría yo) falta de educación, que nunca van a admitir que cometieron un error o que fueron descorteses, les pido, con todo mi buen humor, que guarden su batería de improperios y se vayan a cantarle a Gardel (quien en realidad, no tiene la culpa pobre, y hace ya demasiado tiempo viene recibiendo sátrapas de todo tipo y que seguramente, cantan muy mal).

2 comentarios:

Joe dijo...

La mala onda de ciertas personas, sobre todo en grupos grandes, es inevitable. Simplemente hay que tratar de evitarla, ignorarlas, y pasarla lo mejor posible. No se puede hacer que todos tengan buena onda, eso depende de cada uno. Y cuando uno sea el que tiene mala onda... igual! :P
Pero q jode, jode

Dandy dijo...

Concuerdo con usted, Dr.
El problema aparece cuando la mala onda surge en el tête à tête.